Créditos personales
Créditos personales en México al instante
¿Estás pasando por un mal momento económico y necesitas dinero?
¿Tienes que hacer una compra o pagar un gasto que no esperabas, pero estás sin liquidez?
Son situaciones por las que todo el mundo pasa alguna vez en su vida. Pero, a pesar de ser muy comunes, pueden causar una gran angustia en quien las vive.
¿Qué puedes hacer en estos casos?
Una opción es acudir a tu banco y solicitar un préstamo. Pero las opciones de que te lo concedan son escasas, ya que las exigencias son muy elevadas.
Además, tienes que dedicar una gran cantidad de tiempo y energía para completar la tramitación: desplazarte a la oficina, entregar montones de documentos, dar explicaciones sobre la finalidad del dinero…
Y después de todo eso, toca esperar varios días a que te den una respuesta.
Como alternativa, tienes a tu alcance los créditos personales. Una solución con la que puedes disponer de dinero urgente de forma rápida y sencilla.
Si quieres saber más sobre qué son y cómo funcionan estos créditos, te lo explicamos a continuación.
¿Qué son los créditos personales?
Los créditos personales son de los productos de financiamiento más populares de la actualidad.
¿Pero sabes en qué consisten exactamente?
Cuando hablamos de un crédito personal, nos referimos a una cantidad de dinero que una entidad financiera te concede por un plazo de tiempo determinado para ayudarte a cubrir tus gastos personales o domésticos.
Durante ese tiempo, puedes disponer libremente de los pesos, siempre que no llegues al límite fijado en el contrato.
Posteriormente tendrás que devolver el dinero que hayas gastado, añadiendo los intereses correspondientes.
Características de los créditos personales
Estos créditos tienen algunas particularidades que los diferencian de otros productos financieros.
Estas son las más importantes:
- Finalidad: están destinados a fines particulares, sin que sea necesario concretar a qué lo vas a dedicar. Puede ser la compra de un nuevo electrodoméstico, la reparación de una avería o la reserva de unas vacaciones familiares, por ejemplo. No se consideran parte de esta modalidad los créditos empresariales ni los destinados a la compra de un bien en concreto, como los créditos para autos o los hipotecarios.
- Cantidad: su objetivo es ayudarte a pagar pequeños gastos e imprevistos puntuales. Por eso, el monto que puedes obtener con un crédito personal suele ser limitado. Gracias a eso, la devolución se hace más cómoda. Aun así, el importe máximo depende de cada entidad. Algunas ofrecen límites más altos —de miles de pesos—, mientras que otras solo conceden créditos de pocos cientos de pesos.
- Tiempo de espera: igualmente, el tiempo de espera para recibir el dinero tampoco es el mismo en todos los casos. La demora puede ser de días, semanas o de solo unos minutos, como ocurre con los créditos personales urgentes. En este tipo de créditos el proceso de concesión está automatizado y la respuesta te llegará casi al instante.
Diferencias entre préstamo y crédito personal
Seguro que te estás preguntando si estos dos productos financieros son lo mismo.
En ese caso, debes saber que no lo son.
Aunque tienen una función similar (conseguir dinero extra para cubrir tus necesidades personales), existen algunas diferencias que debes conocer.
Para empezar, cuando obtienes un préstamo, la entidad te entrega todo el importe que hayas solicitado de una vez.
En cambio, al solicitar un crédito, no recibes el dinero directamente. En lugar de eso, la entidad te proporciona acceso a una cuenta con un límite de dinero determinado que no puedes sobrepasar.
Pero tú retiras el dinero a tu ritmo, a medida que lo necesites.
De ti depende si gastas todo el monto que tienes a tu disposición, si solo gastas una parte o si finalmente no haces uso de él.
Esto hace que los intereses también funcionen de forma diferente en un caso y en otro:
- En los préstamos (prestamoenlinea.mx/prestamos): pagas los intereses correspondientes por todo el dinero recibido. No importa cuántos pesos hayas gastado.
- En los créditos (prestamoenlinea.mx/creditos): solo pagas los intereses por el dinero que has dispuesto. Cuanto menos gastes, menos pagas.
Ventajas de los créditos personales en línea
Puedes solicitar tu crédito en un banco o en una de las entidades financieras de créditos personales que operan online.
En esta página nos centramos en la segunda opción, ya que brindan numerosas ventajas respecto a los bancos tradicionales.
Entre ellas, destacan las siguientes.
Rapidez
Contratar un crédito solo te llevará unos minutos. Los necesarios para elegir la cantidad que deseas, rellenar un formulario y enviar algunos documentos para verificar tus datos.
Si eliges un crédito personal inmediato, sabrás si la operación ha sido aprobada al instante y podrás acceder al dinero sin demoras.
¡Se acabaron las largas esperas! Además, existen incluso créditos sin buro (prestamoenlinea.mx/creditos/sin-buro) para esas personas que tienen un mal historial crediticio.
Flexibilidad
Las entidades ofrecen una gran libertad a la hora de solicitar tus pesos.
Puedes elegir el límite y el plazo de devolución que quieras, adaptando el crédito a tus necesidades económicas.
Y una vez que dispongas del dinero, solo retiras lo que necesites.
Comodidad
Solo hace falta una conexión a Internet y una computadora o un smartphone para tramitar la solicitud.
Puedes hacerlo sin tener que salir de casa ni sufrir largas colas.
Por eso, estos créditos personales rápidos son la mejor opción si estás ocupado y no tienes tiempo para desplazarte a una oficina varias veces para firmar papeles, como sucede con los préstamos bancarios.
Requisitos para obtener un crédito personal en México
¿Ya estás decidido a solicitar tu crédito personal?
Entonces, estás a solo un paso de tener tu dinero listo para emplearlo en lo que necesites.
Eso sí, asegúrate de cumplir estos sencillos requisitos:
- Tener más de 18 años: esta es la edad exigida por la mayoría de las entidades, aunque en algunos casos debes tener 21 años cumplidos.
- Residir en México: no es necesario que tengas la nacionalidad mexicana, pero sí que residas legalmente en este país.
- Disponer del documento de identidad en regla: lo necesitarás para demostrar que los datos que has facilitado son ciertos.
- Tener una fuente de ingresos: aunque existen créditos personales sin comprobante de ingresos, muchas entidades pueden pedirte la nómina para asegurarse de que eres solvente.
Estas son las condiciones más comunes que encontrarás en la mayoría de las compañías prestamistas, aunque pueden variar ligeramente según la oferta que contrates.