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Nadie está exento de tener problemas económicos. Un despido inesperado, una
mala racha, una enfermedad o una avería con la que no contábamos nos puede
descabalar por completo nuestras finanzas personales. Pero si nos vamos a
acostumbrando a ahorrar un poco cada mes, cuando llegue un imprevisto
tendremos un pequeño colchón que nos ayudará a sobrellevarlo mejor.
8 consejos fáciles para ahorrar sin que te des ni cuenta
Nadie está exento de tener problemas económicos. Un despido inesperado, una mala racha, una enfermedad o una avería con la que no contábamos nos puede descabalar por completo nuestras finanzas personales. Pero si nos vamos a acostumbrando a ahorrar un poco cada mes, cuando llegue un imprevisto tendremos un pequeño colchón que nos ayudará a sobrellevarlo mejor.
Mucha gente, cuando se encuentra con problemas financieros, se queja de que su sueldo no le llega y que no tiene más remedio que acudir a los prestamos por internet para cubrir todas sus necesidades básicas.
Aunque en Prestamoenlinea.mx somos especialistas en créditos rápidos online de todo tipo, lo cierto es que, en muchas ocasiones, las familias abusan del endeudamiento, cuando sería más eficaz reducir gastos y ahorrar un poco.
Con esto no quiero decir que haya que apretarse el cinturón al máximo, pero con un mínimo de esfuerzo los resultados serán muy vistosos.
Pero para eso hay que entender que la economía doméstica debe regirse como un gobierno o una empresa. Así, cuando llegan los apuros económicos, conviene resolverlos no solo incrementando los ingresos, sino también reduciendo los gastos.
En este artículo te voy a dar algunas ideas que te permitirán ahorrar poco a poco, sin que apenas te des cuenta.
1.Participa en el “Desafío de las 52 semanas”
Guarda en un bote 50 pesos la primera semana del año; 100 pesos, la segunda semana; 150 pesos, la tercera semana; 200 pesos, la cuarta semana…
Si eres capaz de cumplir todas las semanas del año —ya sé que las últimas semanas cuestan bastante más—, a final de año tendrás ahorrados una buena cantidad de dinero.
2.Utiliza una hucha
Almacena todas las monedas sueltas que te van sobrando en una hucha que solo debes abrir cuando esté llena del todo.
Ya verás qué rápido crecen esos pequeños ahorros si eres un poco constante.
3.Intenta utilizar la tarjeta solo cuando sea imprescindible
Si te acostumbras a pagar tus gastos del día a día con dinero en efectivo —y no con tarjeta—, empezarás a darte cuenta del valor real de esas pequeñas compras y de cuáles son prescindibles.
Cuando hablo de tarjetas, me refiero a las de débito. Por su idiosincrasia, las tarjetas de crédito son la forma más perfecta de endeudamiento que existe.
4.Espera treinta días antes de hacer cualquier compra
Muchas de las compras que hacemos son impulsivas y no sirven para satisfacer necesidades reales.
Cuando te haga falta algo, espera 30 días antes de adquirirlo. Ya verás cómo cuando haya finalizado el plazo de reflexión en muchas ocasiones ni te acuerdas ya de ello.
La excepción estaría en bienes de primera necesidad, que son necesarios para vivir (si se te rompe la caldera en pleno invierno, por ejemplo, no queda más remedio que arreglarla o comprar otra).
5.Haz una lista de lo que vas a comprar antes de ir a la tienda
Elabora una lista con las cosas que vas a comprar.
¡Y nunca te salgas de esa lista, ni compres otros artículos que no estaban incluidos en la misma!
6.Deja de fumar
El tabaco no es solo una cuestión de salud, también se puede convertir en un problema de economía doméstica.
Vamos a fijarnos en el precio medio de un paquete de tabaco: 50 pesos.
En caso de que fumes una cajetilla al día, si lo dejas ahora mismo y empiezas a guardar todo ese dinero que gastabas en una hucha, dentro de un año tendrás... ¡18,000 pesos!
7.Desenchufa todos los aparatos eléctricos que no estés usando
Tenemos la costumbre de dejar siempre enchufados a la red eléctrica todos los aparatos que no usamos. Por ese motivo, casi todos ellos suelen mostrar pilotos o leds parpadeantes, incluso aunque estén apagados.
Si sumamos todos esos consumos eléctricos, podemos ahorrarnos unos cuantos pesos con solo desenchufarlos o apagar las regletas (si tienen interruptor).
8.Conduce con más suavidad
La conducción agresiva provoca un mayor consumo de combustible. Así que basta con ser algo más suave en la conducción para empezar a ahorrar un poco de dinero en cada desplazamiento.
Además, siempre que puedas, evita el uso del carro privado. En su lugar, viaja en transporte público, que es más barato (y mejor para el medioambiente).
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