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Ya sea por darnos un capricho e irnos de vacaciones, comprar un coche nuevo o
por un imprevisto como una multa o la reparación de un electrodoméstico
averiado, en algún momento de nuestra vida nos hemos encontrado ante el
dilema de necesitar financiación y no saber cómo conseguir liquidez. Hoy en
día es muy difícil de disponer de liquidez suficiente para poder afrontar
gastos algo elevados, y por ello solemos ir al banco a solicitar
financiación para nuestras necesidades. Últimamente, sin embargo, los
bancos se han vuelto más exigentes y conceden muy pocos préstamos.
¿Existen préstamos sin comprobación de ingresos?
Ya sea por darnos un capricho e irnos de vacaciones, comprar un coche nuevo o por un imprevisto como una multa o la reparación de un electrodoméstico averiado, en algún momento de nuestra vida nos hemos encontrado ante el dilema de necesitar financiación y no saber cómo conseguir liquidez. Hoy en día es muy difícil de disponer de liquidez suficiente para poder afrontar gastos algo elevados, y por ello solemos ir al banco a solicitar financiación para nuestras necesidades. Últimamente, sin embargo, los bancos se han vuelto más exigentes y conceden muy pocos préstamos.
¿Por qué es tan difícil conseguir la financiación en un banco tradicional?
Hoy en día, los bancos tradicionales exigen una solvencia económica importante para poder solicitar un préstamo, incluso por montos pequeños. Además, los ingresos tienen que ser oficiales y constantes. La mayoría de las veces solicitan nóminas y contratos fijos además de una antigüedad laboral importante. Pero incluso si tenemos nómina y un buen contrato, el banco nos puede pedir avales o garantías extras para asegurar la devolución del monto prestado. El proceso de solicitud de un microcrédito en un banco tradicional es lento y complicado.
¿Qué alternativas existen a la banca tradicional?
Debido al gran volumen de demanda de créditos a corto plazo y de pequeñas cantidades, han aparecido las empresas llamadas Fintech, entidades de crédito que ofrecen préstamos personalizados para cada solicitante y de manera totalmente online.
Las Fintech son prestamistas privados que operan la mayoría de las veces por internet y ofrecen créditos online, con requisitos simples y fáciles de cumplir. A diferencia de la banca tradicional, los prestamistas en línea aceptan ingresos alternativos de los usuarios, ya sean ingresos por desempleo o por el arrendamiento de una vivienda, y se consideran totalmente válidos en el momento de solicitar la cantidad.
Los montos ofrecidos dependen exclusivamente de cada prestamista. En el mercado existen muchas ofertas, que varían desde los 1,000 hasta los 50,000 pesos, con diferentes plazos de devolución, desde los 7 días hasta varios meses.
Por otro lado, existen diferentes plataformas que ofrecen rankings de prestamistas, reseñas y calculadoras online en las que podemos introducir la información sobre el monto que necesitamos y los plazos de devolución que podemos asumir para calcular el coste del préstamo. Dichas plataformas son una herramienta muy importante para entender y comparar lo que nos ofrece cada entidad y elegir la mejor opción para nosotros.
Una de las mayores ventajas de estas entidades de crédito es la rapidez en la concesión de los préstamos, ya que únicamente deberemos rellenar el formulario de contacto, seleccionar el monto y el plazo de devolución y esperar unos minutos para saber si nos han concedido el préstamo. No debemos desplazarnos a las sucursales y esperar varias horas ni aportar miles de papeles para demostrar nuestra solvencia y nuestra necesidad de financiación.
La mayoría de los prestamistas ni siquiera nos exige una explicación sobre la finalidad del dinero. En cambio, los bancos exigen una breve explicación e incluso documentación fehaciente o comprobante oficial, en qué hemos gastado el dinero de nuestro préstamo o cómo lo vamos a invertir.
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